Novelas exemplares, Volume 3

Capa
Gráficas Reunidas, S.A., 1925

No interior do livro

Páginas seleccionadas

Outras edições - Ver tudo

Palavras e frases frequentes

Passagens conhecidas

Página 372 - La historia es como cosa sagrada; porque ha de ser verdadera, y donde está la verdad está Dios, en cuanto a verdad: pero, no obstante esto, hay algunos que así componen y arrojan libros de sí como si fuesen buñuelos.
Página 377 - ¿Cómo discreta? Cicerón, Cervantes, ni Juan de Mena, ni otro después ni antes, no fueron tan discretos y entendidos.
Página 373 - Contad, señor, lo que quisiéredes y con las menudencias que quisiéredes, que muchas veces el contarlas suele acrecentar gravedad al cuento; que no parece mal estar en la mesa de un banquete, junto a un faisán bien aderezado, un plato de una fresca, verde y sabrosa ensalada. La salsa de los cuentos es la propiedad del lenguaje en cualquiera cosa que se diga.
Página 321 - E'l dì e la notte armata sempre andava Di qua. di là, cercando in monte e in piano. Con Cavalieri erranti riscontrarsi, Ed immortale e gloriosa farsi.
Página 210 - Has de saber, hijo, que en esta villa vivió la más famosa hechicera que hubo en el mundo, a quien llamaron la Camacha de Montilla; fue tan única en su oficio, que las Eritos, las Circes, las Medeas, de quien he oído decir que están las historias llenas, no la igualaron.
Página 205 - ... por esto hay tantos titereros en España; tantos que muestran retablos; tantos que venden alfileres y coplas, que todo su caudal, aunque le vendiesen todo, no llega a poderse sustentar un día; y, con esto, los unos y los otros no salen de los bodegones y tabernas en todo el año; por do me doy a entender que de otra parte que de la de sus oficios sale la corriente de sus borracheras. Toda esta gente es vagamunda, inútil y sin provecho; esponjas del vino y gorgojos del pan.
Página 197 - En dar vueltas a la ciudad, para dejarse ver, se pasó lo que quedaba del día, y la noche nos halló en Triana, en una calle junto al Molino de la Pólvora; y, habiendo mi amo avizorado (como en la jácara se dice) si alguien le veía, se entró en una casa, y yo tras él, y hallamos en un patio a todos los jayanes de la pendencia, sin capas ni espadas, y todos desabrochados...
Página 235 - Papa vestido de pontifical, con doce cardenales, todos vestidos de morado, porque cuando sucedió el caso que cuenta la historia de mi comedia era tiempo de mutatio caparum, en el cual los cardenales no se visten de rojo, sino de morado...
Página 152 - Yo me recuesto — dijo el alférez — en esta silla en tanto que vuesa merced lee, si quiere, esos sueños o disparates, que no tienen otra cosa de bueno si no es el poderlos dejar cuando enfaden.
Página 166 - Llorentes; por donde vine a entender lo que pienso que deben de creer todos: que todos aquellos libros son cosas soñadas y bien escritas para entretenimiento de los ociosos, y no verdad alguna...

Informação bibliográfica