Y miré con todo eso y no vi huella de bestia ninguna. Y es cosa de admirar que no había señal de rueda de coche ni memoria apenas de que hubiese nadie caminado en él por allí jamás. Pregunté, espantado desto, a un mendigo que estaba descansando... Handbuch der spanische Sprache und Litteratur: Prosaischer Theil. Th. 2 ... - Página 274 1801 Visualização integral -
|